Cómo poner pendientes a un bebé reborn

Perforar las orejas de tu bebé reborn es un proceso rápido, sencillo y puedes personalizarlas a tu estilo. Una vez completados los agujeros, puedes añadirle un bonito par de pendientes para diferenciarlo de otros bebés reborn.

Las orejas perforadas son otro elemento que añade autenticidad y belleza a una bebé reborn, por lo que muchos coleccionistas y artistas las prefieren a las orejas sin perforar.

Sin embargo, si piensas perforar las orejas de tu reborn, debes seguir estos pasos para evitar dañarlas. Muy a menudo, la gente perfora agujeros demasiado grandes o incluso agujeros a través de las orejas, causando un daño significativo que a menudo es costoso y difícil de reparar.

Créeme, no querrás acabar con las orejas rotas en tu bebé reborn por querer añadir un par de pendientes como accesorio. La conclusión es que hay que perforar las orejas del recién nacido de alguna manera para evitar este daño.

¿Debo perforar las orejas de mi bebé reborn?

Antes de coger la aguja, pregúntate si realmente quieres perforar la oreja de tu reborn. Una vez que se inserta la aguja y se hace el agujero, este es permanente.

En última instancia, perforar las orejas de una reborn es una decisión personal que solo tú puedes tomar. A algunas personas les gusta el aspecto bonito del accesorio que proporcionan los pendientes, mientras que otras prefieren el aspecto natural de las orejas sin pendientes.

Si no estás segura de si debe perforar las orejas de tu bebé reborn, observa ejemplos de ambos pendientes uno al lado del otro antes de tomar una decisión.

Una de las ventajas menos conocidas de perforar las orejas de tu reborn es que así podrás pasar más tiempo con ella. Aunque solo dediques 5 minutos a ponerle un nuevo par de pendientes, es el momento de establecer un vínculo con tu bebé reborn.

Puede parecer una tontería, pero una fuerte conexión con tu reborn es saludable y te permite apreciar todo el trabajo que se ha hecho para crearlo.

Lo que necesitarás

Esto es lo que necesitarás para empezar

• Un par de pendientes, preferiblemente finos y pequeños para no arruinar tu renacimiento
• Un imperdible o una aguja muy fina
• Un encendedor de bolsillo
• Una pluma estilográfica de punta fina o un bolígrafo negro
• Paño pequeño para lavar

Perforando los oídos de los renacidos

Cuando estés lista para perforar las orejas de reborn, llévalo donde puedas trabajar con él en una mesa. Será diez veces más fácil que ponerse de pie y perforar sus orejas.

Asegúrate de tener una silla cómoda frente a la mesa donde se sentará tu reborn, lo ideal es que esté a la altura de los ojos para que puedas acceder sin tener que doblar el cuello.

Una vez que hayas colocado el reborn renacido sobre la mesa, coge un paño y mójalo con agua caliente. Con este paño húmedo, limpia suavemente las orejas para eliminar la suciedad o el polvo que pueda haberse acumulado en ellas. Aunque no sea visible para el ojo, puede haber una fina capa de polvo en la oreja.

Normalmente, esto no es un problema cuando se perfora la oreja, pero puede volverse negra por el calor. Limpiar los oídos durante uno o dos minutos antes puede ayudar a evitar que esto ocurra.

Márcalas con un rotulador de punta fina, teniendo cuidado de no hacerlo simétrico, o el agujero no quedará bien en el bebé reborn. Desgraciadamente, no es fácil que los agujeros sean iguales en ambos lados, por lo que te rogamos que utilices tu mejor criterio.

Marca el lugar en el que desea que esté el agujero en ambas orejas y pase al siguiente paso.

A continuación, con el paño húmedo que has utilizado para limpiar las orejas de tu bebé reborn, sujeta el extremo romo del alfiler o imperdible y enciende el extremo puntiagudo con un mechero.

Mantén la llama durante unos 5 o 6 segundos para que sea más fácil pasar el hilo por el vinilo. A continuación, coge inmediatamente el alfiler caliente y pásalo por los agujeros marcados en cada oreja lo más rápido posible.

Una vez que se haya terminado de perforar, saca los pendientes y pásalos por las orejas del bebé reborn. Si se hace a tiempo, las orejas deberían estar aún lo suficientemente calientes como para que los pendientes pasen fácilmente.

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